Un nuevo estudio muestra que una pequeña proporción de pacientes con cáncer, especialmente las minorías más jóvenes y de bajos ingresos, retrasaron la atención debido a diferencias raciales, de género y culturales entre paciente y médico. El estudio fue dirigido por investigadores del Centro Oncológico Kimmel de Johns Hopkins en colaboración con la Facultad de Medicina de Dell, la Universidad de Minnesota y el Centro Médico de la Universidad de Vanderbilt. Leer más sobre el estudio aquí.