La extirpación o resección de tumores cancerosos en áreas delicadas como la cabeza y el cuello es un desafío incluso para los cirujanos más experimentados. Un equipo de investigadores de Johns Hopkins ha desarrollado el Sistema Autónomo para la Resección de Tumores (ASTR, por sus siglas en inglés) que puede extirpar tumores con una precisión que rivaliza, o incluso potencialmente supera, a la de los cirujanos humanos.