El cáncer de pulmón es la principal causa de muerte por cáncer en los EE. UU. Y aunque los tratamientos para el cáncer de pulmón avanzado se han vuelto más efectivos, la mejor manera de reducir la mortalidad es detectar la enfermedad tempranamente mediante pruebas de detección con TC de dosis baja (LDCT). Un estudio reciente encontró que la detección anual con LDCT se traduce en una tasa de supervivencia a 20 años del 81%.